Dentro de siete días el mercadillo de Baena volverá a la localidad después de más de tres meses sin poder instalar sus puestos ambulantes en la vía pública. A pesar de que ya en la fase 3 tuvieron la opción de reanudar su actividad, aunque con ciertas limitaciones de espacios y restricciones sanitarias, los comerciantes comunicaron al Ayuntamiento su deseo de esperar a llegar a la “nueva normalidad” para poder reabrir en las condiciones de siempre.
Será, por tanto, el próximo jueves 25 de junio y situados en la ubicación habitual, en la Avenida San Carlos de Chile, cuando los vecinos de Baena podrán volver a darse vueltas entre los puestos, con relativa normalidad, ya que a partir del lunes 21 se espera “que la flexibilización de normas sea distinta y puedan montarlo al 100%”, según explicaba José Gómez, concejal de comercio.
A pesar de que el Ayuntamiento estaba estudiando la manera de abrirlo antes, hasta que no finalizara el estado de alarma los 120 puestos que se suelen montar (la mayoría de 10 metros) tendrían que haberse limitado a 5 metros cada uno, con la separación de dos metros entre ellos y “nadie podría tocar las telas ni la ropa. Habría que colocar plásticos encima, con lo cual la esencia del mercadillo se pierde”.
De ahí que hayan decidido esperar para volver a montar sus puestos hasta el próximo jueves, día en el que ya no habrá aforo (que antes era del 35%) aunque se deberán seguir evitando las aglomeraciones.
Será, por tanto, el próximo jueves 25 de junio y situados en la ubicación habitual, en la Avenida San Carlos de Chile, cuando los vecinos de Baena podrán volver a darse vueltas entre los puestos, con relativa normalidad, ya que a partir del lunes 21 se espera “que la flexibilización de normas sea distinta y puedan montarlo al 100%”, según explicaba José Gómez, concejal de comercio.
A pesar de que el Ayuntamiento estaba estudiando la manera de abrirlo antes, hasta que no finalizara el estado de alarma los 120 puestos que se suelen montar (la mayoría de 10 metros) tendrían que haberse limitado a 5 metros cada uno, con la separación de dos metros entre ellos y “nadie podría tocar las telas ni la ropa. Habría que colocar plásticos encima, con lo cual la esencia del mercadillo se pierde”.
De ahí que hayan decidido esperar para volver a montar sus puestos hasta el próximo jueves, día en el que ya no habrá aforo (que antes era del 35%) aunque se deberán seguir evitando las aglomeraciones.
MARTA BAENA SANZ / ANDALUCÍA DIGITAL
