"Que corra la sangre". Así se titula la última publicación del periodista Manuel Piedrahita, una novela presentada la tarde del jueves en el Casino de Baena que está ambientada en la guerra civil cuya trama arranca en el misterioso asesinato de una mujer en julio de 1936.
Piedrahita aseguró durante la presentación que "debemos aprender de los errores" y dejar de hablar de vencedores y vencidos porque "en la guerra civil, España entera, todos fuimos perdedores". De hecho, el periodista explicó que ha tratado ser "muy objetivo y muy frío" porque aunque no pudieron evitar la contienda, "en ambos bandos hubo personas clarividentes".
Manuel Piedrahita reivindicó la importancia histórica del Casino de Baena y se mostró orgulloso de ser periodista como su padre. También destacó el recorrido de "dos periodistas de Baena que fueron mucho más allá de las fronteras andaluzas, Bermúdez Cañete y Vázquez Ocaña", dos personajes que protagonizan el relato novelesco.
El historiador José Luis Casas mantuvo que la obra tiene mucho de ensayo histórico porque su contexto es el periodo de entreguerras (1919-1939). Según Casas, se establecen muchos paralelismos entre la República de Weimar y la República de 1931 por ser dos intentos de democratizar las realidades alemana y española.
El catedrático egabrense destacó la figura de Bermúdez Cañete, que "fue expulsado de Alemania por criticar el partido Nazi y sus planteamientos frente a los judíos" y adelantó que el libro también trata en su segunda parte los trágicos acontecimientos sucedidos en Baena en julio de 1936.
La segunda teniente de alcalde, Lola Cristina Mata, describió el "impresionante" currículum de Piedrahita en su "amplia y dilatada carrera como periodista y escritor". Mata, que también presentó al autor durante la puesta de largo de su libro "El judío de la Semana Santa de Baena", puso en valor su obra literaria sobre el olivo y sus "ansias de transmitir conocimientos a los demás".
Piedrahita aseguró durante la presentación que "debemos aprender de los errores" y dejar de hablar de vencedores y vencidos porque "en la guerra civil, España entera, todos fuimos perdedores". De hecho, el periodista explicó que ha tratado ser "muy objetivo y muy frío" porque aunque no pudieron evitar la contienda, "en ambos bandos hubo personas clarividentes".
Manuel Piedrahita reivindicó la importancia histórica del Casino de Baena y se mostró orgulloso de ser periodista como su padre. También destacó el recorrido de "dos periodistas de Baena que fueron mucho más allá de las fronteras andaluzas, Bermúdez Cañete y Vázquez Ocaña", dos personajes que protagonizan el relato novelesco.
El historiador José Luis Casas mantuvo que la obra tiene mucho de ensayo histórico porque su contexto es el periodo de entreguerras (1919-1939). Según Casas, se establecen muchos paralelismos entre la República de Weimar y la República de 1931 por ser dos intentos de democratizar las realidades alemana y española.
El catedrático egabrense destacó la figura de Bermúdez Cañete, que "fue expulsado de Alemania por criticar el partido Nazi y sus planteamientos frente a los judíos" y adelantó que el libro también trata en su segunda parte los trágicos acontecimientos sucedidos en Baena en julio de 1936.
La segunda teniente de alcalde, Lola Cristina Mata, describió el "impresionante" currículum de Piedrahita en su "amplia y dilatada carrera como periodista y escritor". Mata, que también presentó al autor durante la puesta de largo de su libro "El judío de la Semana Santa de Baena", puso en valor su obra literaria sobre el olivo y sus "ansias de transmitir conocimientos a los demás".
JESÚS ORDÓÑEZ / ANDALUCÍA DIGITAL
