Recientemente han aparecido en nuestro país dos libros del historiador israelí Ilan Pappé, de los que creo que merece la pena hacer referencia dada la enorme tragedia que sufre el pueblo palestino. Se trata de Breve historia del conflicto entre Israel y Palestina y El lobby judío.
Sobre Ilan Pappé, tiempo atrás, publiqué un artículo que aludía a algunos de sus libros, como La limpieza étnica de Palestina, Los palestinos olvidados, La cárcel más grande de la Tierra, Los diez mitos de Israel o Historia de la Palestina moderna, que habían sido publicados en castellano, por lo que no cabe duda de que nos encontramos ante uno de los historiadores más y mejor informados del desamparo que padece el pueblo palestino.
A pesar de sus orígenes, ya que nació en la ciudad de Haifa, de la que fue profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de esta ciudad, tuvo que salir de su país con su familia y establecerse en la ciudad británica de Exeter, donde ahora es profesor de Historia, al tiempo que codirige el Centro Exeter de Estudios Etnopolíticos.
Si he hecho referencia a este autor se debe a que el primero de los dos libros citados (Breve historia del conflicto entre Israel y Palestina) resulta fundamental para quien desee tener un conocimiento ajustado del nacimiento del sionismo y del calvario que ha supuesto a la población nativa de Palestina la implantación de un Estado judío en una tierra milenaria.
Se trata, como bien dice el título, de una breve historia, puesto que el libro solo tiene 125 páginas, explicada en sus aspectos esenciales, para que sea accesible a todo aquel que quiera saber de dónde surgió la idea de la creación de un Estado para los judíos en una tierra habitada desde siglos atrás tanto por palestinos, la mayoría, como por judíos, la minoría.
Lógicamente, no tiene mucho sentido intentar hacer un resumen sobre el esfuerzo que ha supuesto al profesor Pappé sintetizar siglo y medio desde la fundación del nuevo sionismo. Y digo "nuevo" porque, curiosamente, tal como él explica, "el sionismo llegó como una importación extranjera. Empezó en el siglo XVI como un proyecto evangélico cristiano en Europa. Una cifra significativa de cristianos protestantes creía que el regreso del pueblo judío a ‘Sion’ satisfaría la promesa de Dios a los judíos del Antiguo Testamento. Esto sería presagio de la Segunda Venida de Cristo, que marcaría el fin del mundo; un proceso que muchos evangélicos querían acelerar" (pág. 10).
Antes de cerrar esta breve presentación, quisiera aludir a dos aspectos. Por un lado, Ilan Pappé llama al Estado judío creado “colonialismo de asentamiento”, puesto que han sido miles de judíos extranjeros los llegados a Palestina para desplazar de sus tierras a la población nativa, a diferencia del colonialismo tradicional, en la que el gobierno de la población colonizada se contralaba desde la metrópoli.
También, que las Naciones Unidas no siguió con Palestina el mismo proceso de descolonización llevado a cabo con otros países en el siglo pasado, tras aprobarse el derecho a la autodeterminación de las poblaciones colonizadas, por lo que su postura con respecto a Palestina es que no sea dividida, sino que sea un Estado único, secular o laico, que acoja todo tipo de creencias y sin que sea el judaísmo la que defina al Estado artificial que se ha creado.
Sobre Ilan Pappé, tiempo atrás, publiqué un artículo que aludía a algunos de sus libros, como La limpieza étnica de Palestina, Los palestinos olvidados, La cárcel más grande de la Tierra, Los diez mitos de Israel o Historia de la Palestina moderna, que habían sido publicados en castellano, por lo que no cabe duda de que nos encontramos ante uno de los historiadores más y mejor informados del desamparo que padece el pueblo palestino.
A pesar de sus orígenes, ya que nació en la ciudad de Haifa, de la que fue profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de esta ciudad, tuvo que salir de su país con su familia y establecerse en la ciudad británica de Exeter, donde ahora es profesor de Historia, al tiempo que codirige el Centro Exeter de Estudios Etnopolíticos.

Si he hecho referencia a este autor se debe a que el primero de los dos libros citados (Breve historia del conflicto entre Israel y Palestina) resulta fundamental para quien desee tener un conocimiento ajustado del nacimiento del sionismo y del calvario que ha supuesto a la población nativa de Palestina la implantación de un Estado judío en una tierra milenaria.
Se trata, como bien dice el título, de una breve historia, puesto que el libro solo tiene 125 páginas, explicada en sus aspectos esenciales, para que sea accesible a todo aquel que quiera saber de dónde surgió la idea de la creación de un Estado para los judíos en una tierra habitada desde siglos atrás tanto por palestinos, la mayoría, como por judíos, la minoría.
Lógicamente, no tiene mucho sentido intentar hacer un resumen sobre el esfuerzo que ha supuesto al profesor Pappé sintetizar siglo y medio desde la fundación del nuevo sionismo. Y digo "nuevo" porque, curiosamente, tal como él explica, "el sionismo llegó como una importación extranjera. Empezó en el siglo XVI como un proyecto evangélico cristiano en Europa. Una cifra significativa de cristianos protestantes creía que el regreso del pueblo judío a ‘Sion’ satisfaría la promesa de Dios a los judíos del Antiguo Testamento. Esto sería presagio de la Segunda Venida de Cristo, que marcaría el fin del mundo; un proceso que muchos evangélicos querían acelerar" (pág. 10).
Antes de cerrar esta breve presentación, quisiera aludir a dos aspectos. Por un lado, Ilan Pappé llama al Estado judío creado “colonialismo de asentamiento”, puesto que han sido miles de judíos extranjeros los llegados a Palestina para desplazar de sus tierras a la población nativa, a diferencia del colonialismo tradicional, en la que el gobierno de la población colonizada se contralaba desde la metrópoli.
También, que las Naciones Unidas no siguió con Palestina el mismo proceso de descolonización llevado a cabo con otros países en el siglo pasado, tras aprobarse el derecho a la autodeterminación de las poblaciones colonizadas, por lo que su postura con respecto a Palestina es que no sea dividida, sino que sea un Estado único, secular o laico, que acoja todo tipo de creencias y sin que sea el judaísmo la que defina al Estado artificial que se ha creado.
AURELIANO SÁINZ
FOTOGRAFÍA: AURELIANO SÁINZ
FOTOGRAFÍA: AURELIANO SÁINZ

