“Un entorno donde la producción agraria y la alimentación de la población convivan en un escenario de sostenibilidad”. Ese es el principal reto del plan de acción Agri-Urban Baena, que ha sido aprobado por unanimidad del Pleno para hacer de Baena en los próximos tres años “una ciudad más saludable y habitable y con personas más sanas”.
El documento, fruto de la participación ciudadana y el consenso de más de 50 personas y colectivos, expone la necesidad de fomentar el empleo agrario a través del apoyo de los canales cortos de comercialización, la educación alimentaria, la creación de pequeñas infraestructuras, el autoconsumo y la producción social.
Para ello se articula en diez grandes acciones como el incremento de la oferta de alimentos locales y ecológicos, facilitar el acceso a la tierra y promover un uso eficiente y sostenible de la superficie agraria o la introducción progresiva de la comida local y ecológica en los comedores escolares.
Uno de los puntos fuertes del plan es la puesta en marcha de un centro dinamizador de nuevas iniciativas agroalimentarias, denominado Baena Food hub, destinado al almacenamiento, transformación y distribución de alimentos ecológicos producidos por emprendedores.
A este proyecto se suma el ya iniciado de Cosecha Social de Baena con los huertos sociales de la Cañada, en la calle Pedro Reyes, así como la mejora del conocimiento y posicionamiento de la marca Baena Ciudad del Olivar y el Aceite, que incluye nuevos usos para el Museo del Olivar y el Aceite.
Por otro lado, Agri-Urban también pretende conseguir una “ciudad comestible” a través de una apuesta por la plantación de árboles y plantas aromáticas y la reducción y eliminación de fitosanitarios de origen químico en jardines y otros espacios públicos.
El alcalde, Jesús Rojano, coincidió con el resto de portavoces municipales en que se trata de un “plan ambicioso y muy adecuado a la realidad de Baena” al incidir en la búsqueda de canales cortos de comercialización y diversificación del cultivo del olivar.
Para Rojano el plan contribuirá a la generación de empleo y garantizará “una alimentación mucho más rica y saludable”. En este sentido, el primer edil expuso la conveniencia de que los restaurantes y comedores puedan incorporar platos del Guadajoz y el Marbella que hagan referencia a productos locales.
El plan de acción Agri-Urban, que se completa con un plan de comunicación y un equipo de trabajo que busque vías de financiación para la puesta en marcha de las acciones, es el resultado de la red europea que lidera Baena dentro del Urbact III, un programa de cooperación territorial de la Unión Europea dirigido a promover un desarrollo urbano sostenible e integrado.
El documento, fruto de la participación ciudadana y el consenso de más de 50 personas y colectivos, expone la necesidad de fomentar el empleo agrario a través del apoyo de los canales cortos de comercialización, la educación alimentaria, la creación de pequeñas infraestructuras, el autoconsumo y la producción social.
Para ello se articula en diez grandes acciones como el incremento de la oferta de alimentos locales y ecológicos, facilitar el acceso a la tierra y promover un uso eficiente y sostenible de la superficie agraria o la introducción progresiva de la comida local y ecológica en los comedores escolares.
Uno de los puntos fuertes del plan es la puesta en marcha de un centro dinamizador de nuevas iniciativas agroalimentarias, denominado Baena Food hub, destinado al almacenamiento, transformación y distribución de alimentos ecológicos producidos por emprendedores.
A este proyecto se suma el ya iniciado de Cosecha Social de Baena con los huertos sociales de la Cañada, en la calle Pedro Reyes, así como la mejora del conocimiento y posicionamiento de la marca Baena Ciudad del Olivar y el Aceite, que incluye nuevos usos para el Museo del Olivar y el Aceite.
Por otro lado, Agri-Urban también pretende conseguir una “ciudad comestible” a través de una apuesta por la plantación de árboles y plantas aromáticas y la reducción y eliminación de fitosanitarios de origen químico en jardines y otros espacios públicos.
El alcalde, Jesús Rojano, coincidió con el resto de portavoces municipales en que se trata de un “plan ambicioso y muy adecuado a la realidad de Baena” al incidir en la búsqueda de canales cortos de comercialización y diversificación del cultivo del olivar.
Para Rojano el plan contribuirá a la generación de empleo y garantizará “una alimentación mucho más rica y saludable”. En este sentido, el primer edil expuso la conveniencia de que los restaurantes y comedores puedan incorporar platos del Guadajoz y el Marbella que hagan referencia a productos locales.
El plan de acción Agri-Urban, que se completa con un plan de comunicación y un equipo de trabajo que busque vías de financiación para la puesta en marcha de las acciones, es el resultado de la red europea que lidera Baena dentro del Urbact III, un programa de cooperación territorial de la Unión Europea dirigido a promover un desarrollo urbano sostenible e integrado.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
