Baena por Santa María. Ese es el título de la conferencia que pronunciará este domingo Julio Rodrigo Fernández García en la Iglesia de Santa María la Mayor para rendir homenaje y recordar a Juan Espejo Gómez, su párroco desde los años 1967 a 1972.
La ponencia tendrá lugar tras finalizar la misa de las 21.00 que oficiará Juan Laguna Navarro. La idea de Fernández García es recordar que en este mes de agosto se cumplen 50 años del nombramiento de Juan Espejo como párroco de Santa María la Mayor.
El conferenciante se remontará al mes de abril de 1972, cuando se publicó la circular número 4 de Baena por Santa María, una publicación de la parroquia en la que el sacerdote daba a conocer las condiciones de una suscripción popular para sufragar el proceso de restauración del templo.
Los orígenes de Santa María la Mayor se remontan al Siglo XIII, momento en que pudo albergar alguna mezquita. Su riqueza arquitectónica es comparable al devenir de su historia, envuelta en multitud de avatares como el terremoto de 1681 o el grave incendio que sufrió durante la contienda civil.
Tras la restauración de 2003, en la actualidad presenta una planta con tres naves separadas por arcos ojivales que recaen sobre pilares góticos, típicos de la arquitectura cordobesa del Siglo XVI. Sus puertas –la del Ángel y la del Perdón– tienen un especial simbolismo para todos los cofrades baenenses.
La ponencia tendrá lugar tras finalizar la misa de las 21.00 que oficiará Juan Laguna Navarro. La idea de Fernández García es recordar que en este mes de agosto se cumplen 50 años del nombramiento de Juan Espejo como párroco de Santa María la Mayor.
El conferenciante se remontará al mes de abril de 1972, cuando se publicó la circular número 4 de Baena por Santa María, una publicación de la parroquia en la que el sacerdote daba a conocer las condiciones de una suscripción popular para sufragar el proceso de restauración del templo.
Los orígenes de Santa María la Mayor se remontan al Siglo XIII, momento en que pudo albergar alguna mezquita. Su riqueza arquitectónica es comparable al devenir de su historia, envuelta en multitud de avatares como el terremoto de 1681 o el grave incendio que sufrió durante la contienda civil.
Tras la restauración de 2003, en la actualidad presenta una planta con tres naves separadas por arcos ojivales que recaen sobre pilares góticos, típicos de la arquitectura cordobesa del Siglo XVI. Sus puertas –la del Ángel y la del Perdón– tienen un especial simbolismo para todos los cofrades baenenses.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
