La Diócesis de Córdoba está de enhorabuena porque ya cuenta con seis nuevos presbíteros. El Obispo de Córdoba, Monseñor Demetrio Fernández, ha administrado esta mañana este sacramento al baenense Eugenio Bujalance Serrano, Jorge Manuel Díaz, Francisco Javier García, Fernando Santiago Luján, Carlos Morales y Juan Antonio Reyes. Todos ellos han estado acompañados en la ceremonia por su Rector, formadores y compañeros seminaristas del Seminario Mayor “San Pelagio”, así como por buena parte del clero cordobés, sus familiares y amigos.
En la homilía, el obispo ha mencionado una frase del santo cura de Ars que los seminaristas han escogido para el libro-guía de la liturgia: “el sacerdote es el amor del corazón de Cristo”. Al hilo de esto, ha afirmado que en esta ocasión, se ha hecho presente “el amor multiplicado por seis”.
Asimismo, el pastor de la Diócesis ha destacado que se trata de “un día grande para el presbiterio diocesano” porque estos nuevos curas serán “una ayuda inestimable para el pueblo de Dios”. A continuación, el prelado ha felicitado al Rector del Seminario, Antonio Prieto, a los formadores, y especialmente, a las familias “a las que Dios bendice su hogar con una vocación sacerdotal”.
De otro lado, a los ordenandos se ha dirigido con estas palabras: “no cabe en estas cúpulas la grandeza del sacerdocio tal y como Jesucristo la ha instituido, y uno se siente tan poca cosa…”. Y ha continuado explicando que esta humildad la iban a expresar con el gesto de la postración. En cuanto al gesto de la imposición de manos, Demetrio Fernández ha indicado que “es el Señor el que alarga su mano y toca vuestras cabezas” y que “es la acción de Dios la que os capacita para celebrar los sacramentos”.
Finalmente, el obispo ha felicitado a los ordenados y al presbiterio diocesano. Tras su ordenación como presbítero, el nuevo párroco baenense celebrará su primera misa el día 1 de junio a las 20.30 de la tarde en la Parroquia de Guadalupe.
En la homilía, el obispo ha mencionado una frase del santo cura de Ars que los seminaristas han escogido para el libro-guía de la liturgia: “el sacerdote es el amor del corazón de Cristo”. Al hilo de esto, ha afirmado que en esta ocasión, se ha hecho presente “el amor multiplicado por seis”.
Asimismo, el pastor de la Diócesis ha destacado que se trata de “un día grande para el presbiterio diocesano” porque estos nuevos curas serán “una ayuda inestimable para el pueblo de Dios”. A continuación, el prelado ha felicitado al Rector del Seminario, Antonio Prieto, a los formadores, y especialmente, a las familias “a las que Dios bendice su hogar con una vocación sacerdotal”.
De otro lado, a los ordenandos se ha dirigido con estas palabras: “no cabe en estas cúpulas la grandeza del sacerdocio tal y como Jesucristo la ha instituido, y uno se siente tan poca cosa…”. Y ha continuado explicando que esta humildad la iban a expresar con el gesto de la postración. En cuanto al gesto de la imposición de manos, Demetrio Fernández ha indicado que “es el Señor el que alarga su mano y toca vuestras cabezas” y que “es la acción de Dios la que os capacita para celebrar los sacramentos”.
Finalmente, el obispo ha felicitado a los ordenados y al presbiterio diocesano. Tras su ordenación como presbítero, el nuevo párroco baenense celebrará su primera misa el día 1 de junio a las 20.30 de la tarde en la Parroquia de Guadalupe.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
