Desde bien temprano y tras repartir ilusión y miles de regalos a los niños de Baena durante toda la noche, Sus Majestades los Magos de Oriente, acompañados de la charanga luqueña Street Music, recorrieron algunas calles de Baena repartiendo cientos de regalos con algunas visitas inesperadas a las personas más desfavorecidas de la localidad.
La mañana comenzaba con una neblina que hacía perderse los edificios y que quiso acompañar a Sus Majestades a la eucaristía que se celebraba en el Convento de dominicas de Madre de Dios, estando presidida la misma por el sacerdote baenense José Priego, que elogió la labor realizada por la Asociación Cultural Iponubensis en la organización de la cabalgata de Reyes desde hace dos años. Tras la misma, Sus Majestades adoraron al Niño Dios y pasaron a visitar a las dominicas que moran en el convento entregándoles unos presentes.
Durante toda la mañana los Reyes visitaron diferentes calles de la localidad en un cortejo a pie, acompañados de su séquito y visitando a ancianos y niños entregándoles ilusión y algún que otro presente además de un mensaje para todos ellos de alegría y prosperidad en estos tiempos difíciles en los que vive la sociedad.
En torno al mediodía la comitiva real visitó también la parroquia de San Bartolomé, donde Sus Majestades besaron al Niño Dios y cantaron villancicos con los compases navideños del Grupo Rociero Salvador Muñoz, que puso la nota musical. Para finalizar la mañana recorrieron la barriada de San Pedro, donde visitaron a los ancianos y niños más desfavorecidos de la localidad llevándoles la alegría de la magia de la navidad en forma de caramelos y regalos.
Ya entrada la tarde visitaron la residencia de ancianos de Personalia en el paraje del Zambudio. Antes de preparar su regreso a Oriente, los Magos se despedían de los baenenses en la barriada de la Haza del Reloj, donde los vecinos recibieron a Sus Majestades con gran alegría compartiendo una gran chocolatada y churros que habían realizado para la ocasión.
Desde un balcón lanzaron caramelos y golosinas, que hicieron las delicias de los más pequeños de la barriada, además de entregar algunos regalos y realizarse varias fotografías para el recuerdo con los vecinos, que agradecieron a la organización el gesto de acercar la ilusión hasta su barrio.
La mañana comenzaba con una neblina que hacía perderse los edificios y que quiso acompañar a Sus Majestades a la eucaristía que se celebraba en el Convento de dominicas de Madre de Dios, estando presidida la misma por el sacerdote baenense José Priego, que elogió la labor realizada por la Asociación Cultural Iponubensis en la organización de la cabalgata de Reyes desde hace dos años. Tras la misma, Sus Majestades adoraron al Niño Dios y pasaron a visitar a las dominicas que moran en el convento entregándoles unos presentes.
Durante toda la mañana los Reyes visitaron diferentes calles de la localidad en un cortejo a pie, acompañados de su séquito y visitando a ancianos y niños entregándoles ilusión y algún que otro presente además de un mensaje para todos ellos de alegría y prosperidad en estos tiempos difíciles en los que vive la sociedad.
En torno al mediodía la comitiva real visitó también la parroquia de San Bartolomé, donde Sus Majestades besaron al Niño Dios y cantaron villancicos con los compases navideños del Grupo Rociero Salvador Muñoz, que puso la nota musical. Para finalizar la mañana recorrieron la barriada de San Pedro, donde visitaron a los ancianos y niños más desfavorecidos de la localidad llevándoles la alegría de la magia de la navidad en forma de caramelos y regalos.
Ya entrada la tarde visitaron la residencia de ancianos de Personalia en el paraje del Zambudio. Antes de preparar su regreso a Oriente, los Magos se despedían de los baenenses en la barriada de la Haza del Reloj, donde los vecinos recibieron a Sus Majestades con gran alegría compartiendo una gran chocolatada y churros que habían realizado para la ocasión.
Desde un balcón lanzaron caramelos y golosinas, que hicieron las delicias de los más pequeños de la barriada, además de entregar algunos regalos y realizarse varias fotografías para el recuerdo con los vecinos, que agradecieron a la organización el gesto de acercar la ilusión hasta su barrio.
CARLOS BERNAL / BAENA DIGITAL